El mundo del fútbol lleva más de una semana hablando de la preparación que Real Madrid y Atlético de Madrid están realizando con vistas a la final de la Champions del próximo sábado. Cuando pase el derbi, que determinará que club reina en el Viejo Continente, los medios de comunicación nos bombardearán con el mismo tema, en este caso, centrándose en las selecciones nacionales que participarán a partir del 10 de junio en la Eurocopa Francia 2016.
Pero no siempre una planificación exhaustiva para afrontar un gran torneo garantiza quién se llevará el gato al agua. A veces puede proclamarse campeón un equipo que no tenía entre sus planes participar. Al menos, eso piensan los daneses desde el éxito que cosecharon en la Eurocopa Suecia 92. Días antes de iniciarse la competición, el rumor de que Yugoslavia sería excluida del torneo por la Guerra de los Balcanes comenzó a extenderse como la pólvora.
Sin embargo, los daneses, que habían sido segundos tras Yugoslavia en su grupo de clasificación, se mostraron escépticos ante estas informaciones y se fueron de vacaciones. Cuando se confirmó la expulsión de los yugoslavos, Möller Nielsen, seleccionador de Dinamarca, tuvo que hacer la convocatoria de una manera muy peculiar: a través de llamadas telefónicas. Los internacionales se encontraban disfrutando de sus días de descanso dispersos por diferentes puntos.

Peter Schmeichel, Brian Laudrup, Henrik Larsen o John Jensen atendieron la llamada y dijeron sí a la extraña aventura en la que se había visto inmersa la Dinamita Roja. No lo hizo su estrella Michael Laudrup, quien rechazó el ofrecimiento para incorporarse a la convocatoria. Con estos antecedentes, nadie apostaba por los daneses en la Euro que se celebraría en su país vecino. El grupo en la primera fase tampoco invitaba al optimismo: Suecia, Francia e Inglaterra.
Dinamarca aceptó el reto. No tenía nada que perder y mucho que ganar. Nadie podría poner ningún reproche a un combinado cuyos futbolistas se había acostado en una playa y se habían levantado ante una oportunidad para hacer historia. Los daneses debutaron con un empate sin goles ante los británicos. En su segundo encuentro, cayeron derrotados por la mínima ante los suecos. Parecía que aquel extraño viaje llegaría a su fin tras el partido contra los galos.
Sin embargo, Dinamarca comenzó a mostrar ante Francia las virtudes que lo llevarían a levantar el título como rey de Europa. Larsen adelantó a los daneses en la primera parte. Papin igualó el marcador en el segundo tiempo. Cuando el choque parecía que acabaría en tablas, resultado que daba el pase a los franceses, un gol de Elstrup en el 93’ desató la locura en el país escandinavo. Las calles de Copenhague celebraron el tanto durante toda la noche.
Ya sólo había espacio para soñar con la machada. En una semana, los hombres de Möller Nielsen habían pasado de no estar clasificados a meterse en semifinales. Allí esperaba Holanda, una selección histórica que podía levantar su segunda Eurocopa consecutiva. La primera parte fue una locura: Larsen en el 5’, Bergkamp en el 23’ y nuevamente el delantero danés en el 33’ ponían el 2-1 con el que se llegó al descanso.
Dinamarca estaba a 45 minutos de hacer historia. El tiempo pasaba y parecía que la Orange sería incapaz de empatar. Pero entonces apareció Rijkaard a dos minutos para el pitido final. Habría prórroga. No se movió el marcador. El finalista que esperaba Alemania saldría desde los once metros. Larsen, Povlsen, Elstrup, Vilfort y Christofte no fallaron su lanzamiento. Schmeichel adivinó el tiro de Van Basten. La gran sorpresa del torneo disputaría el título a los germanos.
Alemania era la gran favorita. La Mannschaft venía de proclamarse campeona en el Mundial de Italia 90 y tenía ante sí la oportunidad de ser el primer combinado nacional en ganar Copa del Mundo y Eurocopa de manera consecutiva. Pero el destino tenía escrito otro guion. Los goles de Jensen (18’) y Vilfort (78’) obraron uno de los mayores milagros de la historia del deporte del balompié. Aunque ya saben, como diría Vudajin Boskov, fútbol es fútbol.
Me acuerdo como si fuese ayer. Q ganas de que empiece la Eurocopa!!!!